El Non Plus Ultra de los collares...definitivamente los collares de perlas

En una casa de antiguedades encontré este cofre hermoso en cobre y bronce. La dueña de la tienda me dijo que era egipcio y que tenia n años. Inmediatamente pensé que nada quedaba mejor dentro de él que un collar de perlas. Siendo el mismo símbolo de la elegancia asegurada en cualquier ocasión. Y es que el collar de perlas es todo un conjunto de armonía y belleza desde el momento mismo que se forma cada una de las perlas que lo engalanan. Imagínense que cuando una ostra deja pasar una arenilla o algún elemento extraño lo rechaza empezando a segregar una sustancia cristalina y dura llamada nácar y la envuelve en capas aislándola. Pasados unos años se forma la perla.
Desde la antigüedad hasta nuestros días las perlas son sinónimo de un alto estatus social y elegancia. Y sobre todo de feminidad. Pero para llevarlas apropiadamente hay que tener en cuenta algunos tips.

Los collares cortos de tres vueltas son ideales para cuellos cuadrados o en V.
Si es corto y de una sola vuelta puede ser usado con una blusa para darle un aire sport o con un traje de noche para realzarlo.
Collares que se llaman princesa son de 43 a 48 cm y se usan con cuellos redondos y altos.
Collares Matine de 50 a 60 cm se usan con ropa sport, conjuntos de lana de jersey y chaqueta.
Collares Opera de 71 a 86 cm de una sola vuelta con escotes altos y redondos.
Collares Cuerda de 1 metro y diez centímetros. El preferido de Coco Chanel... y vaya que sabía cómo llevarlo para verse realmente cautivadora. Además este collar es un comodín ya que pueden convertirse en dos y tres vueltas según el broche que se les coloca. Ese es otro punto a parle, ¡los broches!. En la foto con detalle de zafiros. Y en verdad los broches antiguos realizados en platino son tan hermosos por sus detalles y piedras preciosas que los adornan. Enjoy!